domingo

Basta.-

Palabras gestándose en mi interior, rasguñan mis entrañas pidiendo salir. Los dedos no alcanzan a escribir, la cabeza no alcanza a pensar, los labios no alcanzan a modular. Se agrupan de forma desesperada en cada salida del organismo, pidiendo clemencia, aire. Quieren ver y ser vistas, frases, palabras, letras enardecidas. Queman adentro, muy adentro, casi afuera, queman mis tejidos y aceleran mi pulso. Historias que no fueron, retazos de historias que han sido, porciones de historias que serán. Las sienes me aprisionan, la locura, la cordura desesperante. Sale un grito, fuerte, como un susurro, explotan las terminaciones nerviosas, los pies se mueven, hay una música adentro que sale para afuera en miles de letras que son un único y desesperante, aterrante, desgarrante alarido. Nuevamente sale, con una sola palabra. Basta, me pide nuevamente. Basta.-