lunes

Puerto.-

Buscando. Buscando nuevamente lo que buscaba sin saber que lo estaba buscando. Ahora soy conciente, lo sé. Ahora lo busco con los ojos abiertos. Amarse con los ojos abiertos. Amar. Amarme. Entiendo que la búsqueda comienza por casa. Por mí. Por amarme para poder amar nuevamente, y ser amada. Lo entiendo, no lo practico. Empiezo por el final, por ser amada. Pero el horizonte es vasto y no veo puertos. Tampoco veo cipreses. Solamente sé lo que quiero, finalmente, sabiendo que la búsqueda tal vez sea eterna, deba volver a los comienzos, no encuentre donde echar amarras. Y se vuelve un suplicio, por que por momentos siento que debo volver a las bases, a antiguos espacios donde ya no está lo que busco. Y me contengo. Pero tengo un límite, y me desespero, buscando, como una madre un hijo, como un naufrago su playa, como un pirata su tesoro. Y tiemblo, de miedo, de falta, de ganas, de pérdida. Tiémblame todo el cuerpo. Volver a los comienzos, a buscar lo que creía haber encontrado, creí haber perdido, creo haber empezado.

Buscarme.-